Puig Antich: ¿la venganza más cruel de Franco?.




"No estoy seguro de si mis manos están manchadas de sangre. Llevo una bala que me regaló Puig porque no me quiero olvidar de lo que fui". Manifestaba en una entrevista un compañero de Salvador Puig Antich en el Movimiento Ibérico de Liberación (MIL).

Los hechos son que Puig Antich pertenecía a una organización terrorista armada. Que él mismo llevaba consigo un arma cargada (lo que indicaría premeditación) que utilizó contra los policías que intentaban detenerle y en el tiroteo resultó muerto Francisco Anguas, subinspector de Policía.  

Tanto el caso de Puig Antich y el Movimiento Ibérico de Liberación como el del asesinato del presidente del gobierno Carrero Blanco por ETA, eran parte de una actividad terrorista creciente cada vez más activa que llevaría a provocar en los años siguientes centenares de víctimas. Y que tras la muerte de Franco y la llegada de la democracia lejos de desaparecer, aumentó considerablemente.

El Movimiento Ibérico de Liberación se dedicaba a atracar sucursales de bancos, en uno de los atracos un empleado de banca quedó ciego.

Un programa de televisión presenta a Puig Antich como un joven idealista que usa las armas para defender la causa obrera, y éste era el patrón de los miembros de otras organizaciones terroristas de esos años, El FRAP, GRAPO, incluso ETA y la llamada izquierda abertzale... Y no sólo en España, en Italia las Brigadas Rojas fundada en 1970, en Alemania la Fracción del Ejército Rojo operó entre 1970 y 1998... Gente que se embarcaba en aventuras revolucionarias y llevaba en un bolsillo una pistola cargada y en el otro un libro.


Para que un documental sobre le caso de Puig Antich fuera objetivo además de entrevistar a los allegados de éste y como vivieron ese proceso, se debería haber entrevistado también por ejemplo al empleado de banca que perdió la vista en un atraco del MIL (si aún vive) y a los cercanos a él, ¿cómo vivieron ese momento? ¿cómo fue su vida a partir de quedarse ciego?. Y semejante con los cercanos al policía..... Aunque hacerlo hubiera estropeado el relato de joven idealista.

Porque la cuestión del terrorismo de esos años es que personas, aparentemente con vidas normales, en nombre de unos teóricos ideales revolucionarios causaron sufrimiento a cientos de personas.

Antes de que en marzo de 1974 se ejecutara la sentencia contra Puig Antich ya habían sido asesinados por el terrorismo en 1973 el mencionado Carrero Blanco, su escolta y el chofer que conducía el coche que salió literalmente volando por una explosión. En 1960, con tan solo 18 meses María Begoña Urroz Ibarrola es considerada la primera víctima del terrorismo. En 1968 ETA asesina al guardia civil José Pardines Arcay. En 1968, ETA asesina al Inspector jefe Melitón Manzanas González. En 1969, el taxista Fermín Monasterio Pérez de 38 años es asesinado por el miembro de ETA Miguel Etxebarria, que huía herido tras un enfrentamiento con la Policía. En 1971, el Frente de Liberación Catalán (FAC) acaba con la vida del Guardia Civil Dionisio Medina Serrano. En marzo de 1973, Francia, José Humberto Fouz Escobero, Jorge Juan García Carneiro y Fernando Quiroga Veiga, tres amigos nacidos en Galicia y residentes en Irún fueron confundidos con policías españoles por un grupo de etarras que les secuestraron, torturaron y asesinaron, haciendo desaparecer sus cuerpos. En mayo de ese año el FRAP (Frente Revolucionario antifascista patriótico) asesinaba en Madrid a Juan Antonio Fernández Gutiérrez, Subinspector de segunda de Policía. En septiembre, Barcelona, Francisco Jesús Anguas Barragán resultó muerto cuando participaba en una operación policial contra miembros del Movimiento Ibérico de Liberación...

En los más de sesenta años transcurridos desde el primer atentado, la lista de víctimas del terrorismo en España ha superado en total las 1.400 víctimas mortales y casi 5.000 heridos.

Al analizar las estadísticas de los años 70 y 80 se aprecia que los terroristas mataban más cuanto menos temían por su propia vida. Durante los años del franquismo ETA provocó 44 víctimas mortales, con la abolición de la pena de muerte (con la excepción militar para tiempos de guerra); en 1978, hubo 65 asesinados por ésta banda. En 1979, 86. En 1980, 93. En 1981, 32. En 1982, 41. En 1983, 44...





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