El humanismo español tradicional
Ramiro de Maeztu, dibujo de Ramón Casas Nuestro humanismo en las costumbres Entre estos dos sentidos del hombre: el exclusivista del orgullo y el fisiológico de la nivelación, el español tiende su vía media. No iguala a los buenos y a los malos, a los superiores y a los inferiores, porque le parecen indiscutibles las diferencias de valor de sus actos, pero tampoco puede creer que Dios ha dividido a los hombres de toda eternidad, desde antes de la creación, en electos y réprobos. Esto es la herejía, la secta: la división o seccionamiento del género humano. El sentido español del humanismo lo formuló Don Quijote cuando dijo: «Repara, hermano Sancho, que nadie es más que otro si no hace más que otro.» Es un dicho que viene del lenguaje popular. En gallego reza: «Un home non e mais que outro, si non fai mais que outro.» Los catalanes expresan lo mismo con su proverbio: «Les obres fan els mestres.» Estos dichos no son de borrón y cuenta nueva. Dan por descontado que unos hom...